Soy Verbo

- ¿No lo ves? Se ha ido... Silencio largo, con sus labios temblorosos, las lágrimas en su gargantay aquella mirada... aquella mirada... - Dijo: Lo veo, pero lo siento aún más... y bebió su trago amargo, tragó su dolor, y aquella mirada donde brotaron sus lágrimas...

Sí, hoy me tienes sufriendo, sí, hoy no puedo sostener la mirada, sí me levanté con la sonrisa cansada. Sí, hoy con el corazón hecho un puño, sí, hoy las lágrimas del desengaño, sí, el orgullo plasmado en la amohada quedó, sí, hoy lloró a quien todo lo abadonó. Sí, hoy mi voluntad no me pertenece sí, has hecho que hoy todo pese. Sí, hoy te pienso, sí, ayer también sí, quizá mañana...

Soy todo lo que viví, y el resto de lo que fui lo aprendí con el tiempo. Con ganas de estar aquí para más que sobrevivir, sé que soy lo que sueño y todo lo que aprendí. Lo aprendí de vivir, de borrar, de escribir, de tocar el cielo y de caer, con ganas de volver. Aprendí de llorar, de reír, de soñar, de ir al fin del mundo y regresar con ganas de volar. Aprendí de latir, de querer y de seguir libre. Con mucho por vivir, con tanto que decir con ganas de tener más tiempo para repetir. Y todo lo que aprendí de tu corazón soy una parte de ti y lo aprendí de vivir, de borrar, de escribir, de tocar el cielo y de caer con ganas de volver. Aprendí de vivir, de borrar, de escribir, de tocar el cielo y de caer, con ganas de volver Aprendí de llorar, de reír, de soñar, de ir al fin del mundo y regresar con ganas de volar. Aprendí que la mejor sonrisa es la de la mirada, que la vida consiste en caminar apasionada; lo aprendí de reir, de hablar y l...

A quién tratas de engañar amor por favor ya sé que este es el final muy bien. A quien le importa donde ir esta vez , total aquí o allá será igual el adiós. Perdóname si al escucharte dirigiré a otra parte la mirada háblame sin tantas vueltas no utilices nuestras fallas como excusas. A quién crees tu que dolera este fin, a ti que alguien más te espera ya después de mí, a quien le contarás que yo lloré por ti, que ahora solo quieres mi amistad. Perdóname me es tan difícil, no me pidas que te entienda no, no puedo discúlpame pero no es tan fácil borrarlo todo cuando apenas comenzaba. A quién crees tu que dolerá este fin, a ti que alguien más te espera ya después de mi. a quien le contaras que yo lloré por ti, que ahora solo quieres mi amistad.

Con el sentimiento dirigido hacia ti, hacia ti que huiste lejos de aquí, aquí donde dejaste un amor, una herida al corazón y palabras, palabras que retumban, palabras que solo traen preguntas, preguntas que no tienen respuestas, respuestas que son hoy hechos, hechos que marcaron un antes, un ahora y un después en el tiempo, tiempo que solo a ti perteneció, tiempo en que tomaste tu decisión. Decisión que rompe hoy un corazón, un corazón que solo entregó amor, amor que hoy solo ve la espalda, la espalda que hoy le das al amor amor que de un lado fue real, real que hoy prefieres otro lugar, otro lugar, otro calor, otra piel que no es aquí, aquí donde te hice sentir sentir amor, vivir amor y hasta llorar por este amor...conocer el amor amor que supo esperar, esperar y esperar...siempre una respuesta, una respuesta al amor, a el nosotros, nosotros que fuimos uno solo solo quedo yo, yo con el amor, el amor que alcanzó para los dos dos que ya no somos tu y yo, y...

Hoy la nostalgia, quizá la realidad o de pronto el silencio me devuelven a estas letras... Dime por favor donde no estás en qué lugar puedo no ser tu ausencia dónde puedo vivir sin recordarte, y dónde recordar, sin que me duela. Dime por favor en que vacío, no está tu sombra llenando los centros; dónde mi soledad es ella misma, y no el sentir que tú te encuentras lejos. Dime por favor por qué camino, podré yo caminar, sin ser tu huella; dónde podré correr no por buscarte, y dónde descanzar de mi tristeza. Dime por favor cuál es la noche, que no tiene el color de tu mirada; cuál es el sol, que tiene luz tan solo, y no la sensación de que me llamas. Dime por favor donde hay un mar, que no susurre a mis oídos tus palabras. Dime por favor en qué rincón, nadie podrá ver mi tristeza; dime cuál es el hueco de mi almohada, que no tiene apoyada tu cabeza. Dime por favor cuál es la noche, en que vendrás, para velar tu sueño; que no puedo vivir, porque te extraño; y ...