Soy Verbo

Solo la acompaña su sola soledad, da la espalda marca el paso y se marcha, aprendió a alejarse, a estar sola a andar sola, a charlar sola, lamerse sus heridas, curarse y caer siempre de pie. Es fuerte aún cuando llora, perdió su orgullo hace algún tiempo ya, más se vistió de pura dignidad, dejó atrás esa sucia vanidad. Se cansa, se cansa de esperar, se cansa de callar, de optar por no hablar, de mostrar fragilidad. Apasionada mujer, venus de piel cubierta de fuego, quien la sabe encender ha de conocer el placer. Amiga, amante, fiel acompañante de caminos errantes, dueña del silencio y esclava de sus palabras. Fuerte fragilidad tatuaje de vidas sin camino ni caminar...

Dejó pasar el tiempo, sin mirarla sin descifrar por esa ventana lo que albergaba su alma. Muchas las palabras en el silencio, nunca estuvo cuando le necesitaba, tiempo pasaba sin mimarla. Sin responder a su llamada, cuando debajo de sabanas ella trasnochaba, solo se topaba con una fría espalda que la ignoraba. Lágrimas caían al vacío, no habían manos que secaran  su llanto. Tan cerca y tan lejos, eso repetía en aquella lenta agonía. Tuvo valor, se valoró, voló...llenó sus maletas y se marchó. El tiempo pasó, y aquel tipo regresó con sus maletas llenas de mil promesas, lágrimas, besos y caricias con mil tiempos ya a destiempo...

Blanca compañía fiel de las noches en agonía, sin respuesta y en silencio escucha lo que siento, yo presa de mis sentimientos, ella inerte de lo suyos se alimenta de lo que llevo dentro. En silencio solo escucha, mientras el reloj palpita sin tiempo, incondicional espera mi compañía cuando los demás se alejan sin entender, sin escuchar y sin hablar. Paño de mis lágrimas, baúl de mis recuerdos, memorias guarda dentro, miles de pensamientos dueña de mis secretos...